“Asquerosamente Irresistible”: Nacho Rubio convierte las guarrerías infantiles en poesía
Nacho Rubio, escritor y profesor afincado en La Palma, presenta estos días lo que define como “el libro más gamberro, escatológico y divertido del año”. Su obra Los niños guarros, publicada por la editorial gallega Pepa Loba Editora y con ilustraciones del suizo Mark Taeger, se presenta este viernes en la librería El Estudiante de Los Llanos de Aridane y el sábado en el Museo de Arte Contemporáneo de Santa Cruz de La Palma.
El libro, subtitulado Asquerosamente Irresistible, es una colección de 17 poemas rimados —o “historias”, como prefiere llamarlas el autor— que rinden homenaje a esos pequeños personajes que todos conocemos (o somos) y que encarnan las “guarrerías entrañables” de la infancia.
“No es un llamamiento a la suciedad,” aclaró Rubio en la entrevista, “pero sí una forma de ver la vida con sentido del humor, sin extremismos higiénicos y con mucho amor por lo absurdo”.
Un libro entre mocos, caries y carcajadas
Desde la niña que colecciona dientes podridos para hacerse colgantes hasta el niño que inventa un idioma a base de eructos, Los niños guarros es un desfile exagerado y surrealista de personajes que provocan carcajadas y, a veces, un poco de asco. “Lo escribí para divertir, pero también para mostrar lo que no se debe hacer, desde el humor”, explicó Rubio, quien confiesa que la inspiración le llegó desde muy cerca: sus propios hijos.
“Tenía el banco de pruebas en casa”, admitió entre risas. “La realidad es la mejor maestra del escritor. Cuando ves a tu hijo con los mocos eternos o descubres objetos inexplicables en el pañal, o te desesperas o te ríes. Yo elegí lo segundo”.
Una obra para niños… y para padres en apuros
Aunque el libro está dirigido a niños de entre 3 y 10 años, el autor asegura que también puede funcionar como autoayuda para padres: “Lo leen y se dan cuenta de que no están solos. Que sus hijos no son los únicos ‘guarritos’. Incluso descubren que podrían estar peor”.
Además de entretener, Los niños guarros tiene un trasfondo pedagógico. Rubio, profesor de Historia en el IES Luis Cobiella Cuevas, señala que la poesía rimada ayuda a la memoria y a la comprensión lectora: “Mi hijo se sabe los poemas de memoria y me corrige cuando me equivoco”.
Ilustraciones expresionistas y humor sin censura
La condición que impuso Nacho Rubio a la editorial fue clara: el libro debía ilustrarlo Mark Taeger, un artista con más de 50 obras publicadas. El resultado son ilustraciones expresionistas que potencian el humor visual del libro y que capturan la atención incluso de los más pequeños.
El formato breve de los poemas permite que se puedan leer por separado, convirtiéndolos en cuentos ideales para leer antes de dormir. El libro cierra con una fiesta de cumpleaños en la que todos los niños guarros llevan un regalo acorde a su “habilidad especial”, lo que refuerza ese tono de ternura y desenfado que lo recorre de principio a fin.
Del aula a la librería… y a las casas
La obra ya se encuentra entre las más vendidas en gallego en la Casa del Libro y ha sido adoptada por varios colegios como lectura recomendada. “Es un libro que engancha. Los niños lo piden, se sienten identificados, se ríen. Y eso es lo mejor que le puede pasar a un libro infantil”, destacó Rubio.
La presentación en La Palma no será una charla formal, sino un espectáculo con poesía, ilustraciones en directo y talleres interactivos, en el que participará su esposa, Laura —psiquiatra del Hospital General de La Palma—. “Seremos el loco y la psiquiatra en acción, bromeó el autor. “Vamos a jugar, a dibujar y a leer. Lo importante es que los niños salgan riendo”.
