La tecnología inteligente revoluciona la gestión de emergencias en La Palma

La gestión de emergencias en La Palma ha dado un importante salto tecnológico con la implementación de herramientas digitales dentro del proyecto La Palma Smart Island. La combinación de alertas inteligentes, sensores en tiempo real, megafonía digital y notificaciones personalizadas permite una respuesta más rápida y eficiente ante desastres naturales como incendios, meteorología adversa o fenómenos volcánicos.

Así lo destacaron Rafael García, técnico de emergencias, y Juan Antonio Bermejo, técnico de transformación digital del Cabildo de La Palma, durante su intervención en una entrevista en COPE La Palma. Ambos expertos subrayaron el impacto positivo que ha tenido la digitalización aplicada a emergencias, permitiendo mejorar la coordinación, la seguridad de la población y la protección del territorio.

Un antes y un después tras la erupción volcánica

La erupción del Tajogaite en 2021 marcó un punto de inflexión en la gestión de crisis en la isla. “El salto tecnológico ha sido bestial”, aseguró García, quien resaltó que se ha apostado por la monitorización en tiempo real para gestionar emergencias con mayor precisión.

Entre las innovaciones implementadas se encuentran la instalación de sensores de gases en zonas críticas como Puerto Naos y La Bombilla, el despliegue de cámaras térmicas y la integración de estaciones meteorológicas. Esta tecnología permite anticiparse a posibles incidentes y minimizar riesgos.

Coordinación en tiempo real y toma de decisiones más eficaces

Uno de los avances más relevantes ha sido la integración de datos en tiempo real dentro del Centro Coordinador de Emergencias. “Ahora podemos visualizar en tiempo real el estado del parque móvil del Cabildo, la distribución del personal y las condiciones meteorológicas, lo que facilita la toma de decisiones críticas”, explicó Bermejo.

Asimismo, la red de cámaras inteligentes juega un papel crucial. Se han instalado cuatro dispositivos con detección automatizada de incendios mediante inteligencia artificial, así como más de 20 cámaras que permiten un monitoreo continuo del estado de la isla. “El objetivo es minimizar el impacto de las emergencias y salvar vidas gracias a la transformación digital”, indicó Bermejo.

Un sistema de comunicación más eficiente para la población

La información en tiempo real también llega directamente a la ciudadanía a través de diversas plataformas. Entre las herramientas destacadas se encuentran las notificaciones push mediante la aplicación del Cabildo, los más de 20 megáfonos digitales distribuidos en puntos estratégicos de la isla y las pantallas informativas que ofrecen actualizaciones constantes sobre el estado de las emergencias.

“Hace diez años, ante un incendio, la información llegaba con mucho retraso. Ahora, cualquier persona puede recibir alertas en su móvil, escuchar mensajes en la megafonía o ver las indicaciones en pantallas digitales. Esto no solo mejora la seguridad, sino que reduce la incertidumbre y el caos en momentos críticos”, explicó García.

Casos de éxito y proyección futura

Las tecnologías implementadas han demostrado su eficacia en incendios recientes, como el de Puntagorda, donde se activaron los sistemas de notificación y megafonía para coordinar la evacuación. “Funciona, y estamos viendo que la inversión en tecnología se traduce en una mejor respuesta ante emergencias”, afirmó Bermejo.

El Cabildo de La Palma sigue apostando por la innovación en emergencias y se plantea seguir expandiendo estas herramientas para consolidar un sistema de respuesta cada vez más eficaz. “El reto es seguir mejorando y adaptarnos a los nuevos desafíos, pero lo que está claro es que la tecnología ya es un aliado indispensable en la seguridad de nuestra isla”, concluyó García.

Uno de los temas clave fue el sistema de sensores implementado durante la erupción volcánica, que permitió detectar en tiempo real las áreas afectadas por las cenizas, contribuyendo a decisiones cruciales por parte de las autoridades. García destacó la importancia de la red de sensores, asegurando que La Palma es uno de los lugares más monitorizados del mundo en cuanto a calidad del aire. Con cerca de 300 sensores exteriores y 2000 sensores interiores, la isla supera incluso a grandes urbes como Madrid en términos de monitoreo ambiental.

A través del proyecto Alerta CO2, La Palma ha logrado un control exhaustivo sobre los niveles de contaminación, lo que permite a los ciudadanos recibir información precisa y oportuna. “Es imposible que algo escape sin ser detectado,” señaló García, refiriéndose a la precisión de los sensores desplegados en la isla. Esto es especialmente importante en una isla con una topografía compleja, como La Palma, donde el clima puede cambiar drásticamente de una zona a otra, como evidenció el ejemplo reciente de lluvias en Santa Cruz de la Palma y sequedad en San Juanito, a poca distancia.

La meteorología es otro ámbito donde la tecnología está haciendo una gran diferencia. Bermejo señaló los retos meteorológicos propios de la isla y destacó que los sistemas de alerta son cada vez más rápidos y precisos, lo que permite tomar decisiones informadas en situaciones de emergencia. En particular, la implementación de estaciones meteorológicas en puntos estratégicos de la isla ha sido clave para detectar fenómenos como las lluvias torrenciales, que a veces no se registran uniformemente en todo el territorio.

Además, La Palma ha avanzado con la incorporación de cámaras térmicas en zonas forestales, una herramienta vital para detectar incendios en sus primeras fases. Estas cámaras, equipadas con inteligencia artificial, permiten mapear áreas de calor y enviar alertas automáticas a los servicios de emergencia. Aunque aún en fase de expansión, Bermejo explicó que su funcionamiento ha demostrado ser muy eficaz, sobre todo durante la noche, cuando la visibilidad es limitada.

Uno de los puntos más destacados de la entrevista fue la importancia de la aplicación móvil del Cabildo. García recalcó que esta herramienta, que emite notificaciones en tiempo real sobre alertas y emergencias, ha sido esencial en la respuesta ante incendios y otros fenómenos naturales. “La ciudadanía debe tener la aplicación instalada y las notificaciones activadas para recibir información directa y personalizada en caso de emergencia”, comentó.

El impacto de estos avances no solo se limita a la respuesta ante desastres, sino también a la prevención. García y Bermejo coincidieron en que los proyectos en marcha, como la sensorizarización de cabeceras de barrancos, buscan evitar tragedias como la que ocurrió en el Barranco de Agares en el pasado. “Estamos aprendiendo a aplicar la tecnología para prevenir lo que no queremos que ocurra”, expresó Bermejo, subrayando que la isla sigue avanzando en el uso de nuevas tecnologías para mejorar la seguridad y la calidad de vida de sus habitantes.

En definitiva, la combinación de innovación tecnológica, información en tiempo real y una mayor preparación ante desastres naturales coloca a La Palma a la vanguardia en la gestión de emergencias, demostrando que la tecnología puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte en situaciones críticas.